Naciones Unidas y Costa Rica lanzan Programa Conjunto para acelerar la transición energética mediante la Estrategia Nacional de Biometano

San José, 14 de febrero de 2025*. En un esfuerzo por acelerar la transición hacia una economía baja en carbono en Costa Rica, Naciones Unidas, junto al Gobierno de Costa Rica, han lanzado un innovador programa que impulsa una Estrategia Nacional de Biometano para una transición energética justa.

Esta iniciativa es liderada por la Oficina del Primer Vicepresidente, el Ministerio de Ambiente y Energía (MINAE) y la Asociación Costarricense de Biogas (ASOBIOGAS), y las agencias de Naciones Unidas: Organización de las Naciones Unidas para el Desarrollo Industrial (ONUDI) y el Programa de Naciones Unidas para el Desarrollo (PNUD), en colaboración con el Fondo Conjunto de los Objetivos de Desarrollo Sostenible (SDG Fund).

Esta iniciativa que tendrá una inversión de más de 200 millones de colones para apoyar a Costa Rica, impulsará un marco regulatorio y financiero que permita el desarrollo sostenible del sector de biometano, con un enfoque especial en la inclusión de las mujeres y poblaciones en condición de vulnerabilidad.

El programa cuenta con la participación activa de actores públicos y privados. Además, se han desarrollado mecanismos de consulta con diversos sectores para garantizar un enfoque inclusivo y equitativo en la transición energética.

"El sector agrícola de Costa Rica emite alrededor del 27% de los gases de efecto invernadero, principalmente por los residuos de productos de exportación como café, banano, piña y caña de azúcar. Una solución clave es aprovechar esos residuos para producir biogás y biometano, lo cual no solo reduciría las emisiones, sino que también ayudaría a resolver el problema del diésel en nuestra matriz energética. Esta es la belleza de este proyecto: abordar dos grandes desafíos con una sola solución”, aseguró el vicepresidente de la República, Stephan Brunner.

Actualmente, Costa Rica enfrenta varios desafíos críticos en su camino hacia la descarbonización: la dependencia de recursos energéticos no renovables, las emisiones del sector transporte, la generación de residuos agrícolas, especialmente de la industria piñera, y la falta de mecanismos financieros para fomentar la transición energética.

Para abordar estos desafíos, el programa se ha estructurado en dos pilares fundamentales. El primero es el desarrollo del marco regulatorio, que contempla la creación de la “Estrategia Nacional de Biometano” para apoyar el Plan de Descarbonización del país, la implementación de un marco regulatorio que fomente la transición del transporte de carga de combustibles fósiles a biometano, y el fortalecimiento de la infraestructura de calidad del biogás, promoviendo además una mayor participación de las mujeres en el sector.

El segundo pilar se centra en crear herramientas financieras. Esto incluye un fondo para apoyar proyectos ambientales que fomenten la inversión privada en energía limpia. También se establecerá una garantía financiera para reducir riesgos en proyectos de biogás, priorizando a empresas que promuevan la igualdad de género.

"En los últimos años, hemos sido testigos de importantes transformaciones y avances. El fondo está especialmente enfocado en apoyar proyectos y programas que faciliten estas transiciones. Nos complace profundamente estar hoy hablando sobre la transición energética. Nuestro primer objetivo es promover los ODS y ayudar a las Naciones Unidas a trabajar de manera más eficaz", señaló Allegra Baiochhi coordinadora residente de Naciones Unidas en Costa Rica.

El proyecto fortalecerá la transición energética de Costa Rica y  servirá como modelo para otros países de América Latina que buscan desarrollar estrategias similares. La colaboración con entidades financieras como el Banco Centroamericano de Integración Económica (BCIE) y organismos multilaterales permitirá ampliar las oportunidades de inversión y expansión de proyectos sostenibles.

"El biogás tiene un potencial clave para las políticas industriales, donde la transición energética juega un papel fundamental. Para ONUDI, esta transición es esencial para desarrollar políticas industriales modernas. Es crucial invertir en esta transformación, ya que las industrias con altas huellas de carbono perderán competitividad en el futuro”, puntualizó Johannes Dobinger, representante de UNIDO para México y Centroamérica.

Por su parte, Sandra Sosa, representante del PNUD, señaló que "este proyecto resalta, desde su origen, el papel fundamental de Costa Rica en la descarbonización, la importación de electricidad y la diversificación de la matriz energética. Aunque es un gran desafío, también representa una oportunidad que nos llama a la acción para encontrar soluciones innovadoras. Ese es el enfoque central de este proyecto: aprovechar el biometano producido a partir del rastrojo de piña, un recurso disponible en el país".

Sobre el Fondo Conjunto de los Objetivos de Desarrollo Sostenible

El Fondo Conjunto para los ODS recibe apoyo de la Unión Europea, Bélgica, Dinamarca, Alemania, Irlanda, Italia, Luxemburgo, Mónaco, Países Bajos, Noruega, Polonia, Portugal, República de Corea, Arabia Saudí, España, Suecia y Suiza. Junto a nuestros socios y donantes trabajamos para transformar y empoderar a las comunidades, impulsando el desarrollo sostenible en todo el mundo y en cada país donde trabajamos para construir un mejor presente y futuro para todas las personas.