El jueves 30 de mayo se presentó en San José, Costa Rica el Informe de Seguimiento de la Educación en el Mundo (GEM) publicado por la UNESCO. En la actividad, desarrollada en CENAREC, participaron la Directora y Representante de la UNESCO San José, Esther Kuisch Laroche, la Viceministra de Asuntos Académicos del MEP, Giselle Cruz, así como autoridades del Sistema de Naciones Unidas, la Facultad de Educación de la UCR, de la Comisión Nacional de Cooperación con la UNESCO y del CENAREC.
El Informe GEM de 2019 “Migración, desplazamiento y educación: construyendo puentes, no muros” evalúa los avances realizados en la consecución del Objetivo de Desarrollo Sostenible relativo a la educación (ODS 4) y sus diez metas, así como de otras metas relacionadas con la educación de la Agenda 2030 para el Desarrollo Sostenible.
El Informe apunta tanto los logros como las deficiencias de los países a la hora de garantizar el derecho de los niños y las niñas migrantes y refugiados, a beneficiarse de una educación de calidad. Las personas migrantes, refugiadas y desplazadas se encuentran entre los grupos más vulnerables; muchas han sufrido de pobreza, exclusión, violencia, y persecución en sus países.
El Informe también hace referencia al estado de la magnitud y características de los distintos tipos de migración, y las diferencias entre las políticas y tendencias migratorias de los países en el ámbito de la educación.
La Directora Kuisch Laroche destacó que “la educación es clave para la inclusión y la cohesión, y es la mejor forma de forjar comunidades más fuertes y resilientes. Los maestros y las maestras están en la “primera línea de respuesta”, apoyando a los alumnos y las alumnas que enfrentan discriminación o sufren de traumas”.
La educación es un Derecho Humano que se debe garantizar en cualquier momento, en cualquier lugar del mundo. Sin embargo, el informe revela que, en muchas partes del mundo, incluyendo países de América Latina, se ve cuestionado este derecho.
Finalmente, el informe hace diferentes recomendaciones a los países para garantizar el Derecho a la Educación para todas las personas migrantes y refugiadas. Entre las recomendaciones, se encuentra integrar a las personas migrantes y desplazadas en los sistemas nacionales de educación, comprender sus necesidades educativas, y preparar al profesorado para abordar la diversidad y sacar partido al potencial de las personas migrantes y desplazadas.
El lanzamiento se realizó con asocio entre UNESCO, el Ministerio de Educación Pública, la Universidad de Costa Rica, la Comisión Costarricense de Cooperación con UNESCO y otras agencias del Sistema de Naciones Unidas en el país, que son socias importantes, como el Fondo de las Naciones Unidas para la Infancia (UNICEF), la Organización Internacional para las Migraciones (OIM), y el Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Refugiados (ACNUR).